Un poema de Aleksandar Vutimski, del libro "El muchacho azul" (2020).
Aleksandar Vutimski (Svoge, 1919 – Yugoslavia, 1943) fue un poeta y filólogo clásico por la Universidad de Sofia. Casi toda su familia se vio afectada por la tuberculosis, por lo que de pequeño se mudó a Sofía (Bulgaria). Es considerado uno de los poetas más significativos, pero menos conocidos en su país. Su poesía está dedicada a la ciudad y al amor en la que domina una visión del mundo nostálgica y melancólica. Está entre los primeros autores búlgaros en tratar la homosexualidad y la estética en su obra. No publicó ningún libro en vida, aunque algunos de sus poemas fueron publicados en revistas literarias de la época, como Zlatorog.
Скитници
Във нощните, тревожни тъмнини
вървим. - Къде ще стигнеме?… Дъждът.
Далечен плясък в стрехите звъни.
Във нощните, тревожни тъмнини
далече из града
вървим, вървим.
Какви са тия светли отражения,
прорязали на ивици студените,
безлюдни тротоари? - И какви
са тия нощни, мътни светила,
запалени в блестящите дъждовни мрежи?
По бледите ни, ледени чела
струи дъждът.
Далече във безбрежните,
тревожни тъмнини вървим.
Далече из града -
звъни безкрайно - нежно,
звъни в ушите ни,
шуми дъждът…
Вървим… Къде ще стигнеме?…
Студените, безлюдни тротоари.
…Без хляб, без покрив,
измокрени,
заслушани в шума на есенния дъжд.
И вече
- през толкова безкрайни вечери -
заскитали далече, неведнъж,
отпущаме
ръце в студено отчаяние;
и неведнъж,
в мълчание -
със челюсти железни скърцаме в нощта.
Къде ще стигнеме?…
Дъждът шуми. О, тия отражения
по тротоарите! О, тия светила!
- С измръзнали чела
и мрачни -
крачиме
във нощните, трвожни тъмнини.
Ръцете ни,
очите ни,
притеглени, потръпват към вратите и
към тъмните, притихнали стъкла
на къщите…
Сърцето ни? -
Бездънен извор на отчаян устрем.
Vagabundos
En las inquietas tinieblas de la noche
vamos andando: ¿a dónde llegaremos?… La lluvia.
Un lejano destello por los aleros suena.
En las preocupantes e inquietas tinieblas
lejos, por la ciudad,
vamos andando, andando.
¿Qué son estos reflejos de luz,
que cortan en tiras las aceras
frías y desiertas? ¿Qué son
estas luces nocturnas y tenues,
encendidas en esas redes brillantes y lluviosas?
Por nuestras frentes heladas y pálidas
corre la lluvia.
Lejos, allá donde las inquietas
e infinitas tinieblas, vamos andando.
Lejos de la ciudad:
suena infinitamente, con ternura,
suena en nuestros oídos,
susurra la lluvia…
Vamos andando… ¿A dónde llegaremos?…
Las aceras frías y desiertas.
…Sin pan, sin techo,
mojados,
ensimismados en el susurro de la lluvia otoñal.
Y ya,
a través de la infinidad de tantas noches,
habiendo deambulado en lo lejano, no solo una vez,
dejamos caer
nuestras manos en una fría desesperación;
y no una sola vez,
en silencio:
con mandíbulas de hierro chirriamos en la noche.
¿A dónde llegaremos?…
La lluvia susurra. Oh, ¡esos reflejos
por las aceras! Oh, ¡esas luces!
Con las frentes heladas
y oscuras,
caminamos
en las inquietas tinieblas de la noche.
Nuestras manos,
nuestros ojos,
arrastrados, son sacudidos hacia las puertas y
los cristales oscuros y silenciados
de las casas…
¿Y nuestro corazón?:
Un manantial infinito de un impulso desesperado.
- El muchacho azul, libro de Aleksandar Vutimski
No hay comentarios:
Publicar un comentario